los 7 libros


	Cuando Moisés presentó al pueblo de Israel las tablas de la ley, les dijo a todos: "Escuchad, porque estas leyes están escritas en vuestros corazones". No fue a llevar nada raro, nada extraño, nada absolutamente desconocido. En realidad lo que hizo fue despertar en el corazón de aquel pueblo las leyes que ya estaban escritas en sus conciencias desde antes de nacer. Es decir, la ley en realidad estaba escrita en el CORAZÓN del pueblo, no en las tablas. Las tablas servían únicamente para despertar la conciencia. Lo mismo ocurre con el resto de la Biblia. Cristo dijo: "Mis ovejas me conocen y yo las conozco a ellas." En nuestros corazones está escrito, desde antes de nacer, el misterio de la salvación. En nuestro corazón está escrita la Biblia entera. ¿Qué es lo que hace el libro, las palabras impresas? Despertar en nuestras conciencias la Verdad que siempre supimos pero que permanecía dormida. Por eso hay que leer la Biblia, pero sin olvidar que Dios nunca habla desde afuera, desde un libro, sino desde dentro. Pues es allí donde Él está. El libro lo único que hace es iluminar esa presencia divina. Nada más que eso.