los 7 libros


	Añoro mi tierra. Y no se puede añorar algo que no se conoce. Cada vez entiendo más y más las palabras de Jesús: "Mi Reino no es de este mundo." Lucho en este mundo, un país extranjero, por una causa que a nadie le interesa escuchar. Añoro mi tierra y no es cobardía, no se trata de huir para no encarar los problemas. Sé que la puerta que me lleva a mi tierra está delante, al frente, y no es posible llegar hasta ella si no es afrontando todas y cada una de las dificultades que existen en torno a mí. La vida que Dios me ha regalado es hermosa, no debo despreciarla sino aprovecharla hasta lo último, pues es en la vida terrenal donde el ser humano puede acercarse y encontrarse con el Padre. Cuando llega el cansancio pero no llega la muerte, es que aun quedan cosas por hacer.